skip to main
|
skip to sidebar
sábado, 6 de marzo de 2010
Arquitectura (de lo) comestible.
A diario soy consumido por este edificio.
Decidí que mi venganza sería culinaria.
Albúmenes y azúcares conspiraron en mi contra y el comensal nació ya digerido.
Una aquitectura del fracaso se va formando por estratos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Entrada más reciente
Entrada antigua
Inicio
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Prensa
Madriz
Metrópoli
El País
Campo Adentro
Fundación Botín
Archivo Matadero
Marañas
Monleón
Bobby y sus costillas
Delirios culinarios
En torno a,
Seguidores
Archivo del blog
junio
(2)
julio
(3)
agosto
(2)
diciembre
(2)
enero
(3)
febrero
(1)
marzo
(3)
abril
(1)
mayo
(3)
junio
(1)
marzo
(5)
julio
(1)
septiembre
(1)
abril
(1)
junio
(1)
agosto
(1)
enero
(1)
febrero
(1)
marzo
(1)
noviembre
(1)
septiembre
(1)
No hay comentarios:
Publicar un comentario